"Echar la llave al Casco y apagarle la luz no es la solución"

Vista del casco histórico de Toledo desde el Valle.

El alcalde anunciaba durante la firma del convenio con Philips Ibérica que va a plantear algún uso hostelero "razonable y amable" en el Puente de la Cava y en el grupo de Facebook en Defensa del Patrimonio histórico, artístico y natural de Toledo se abría un debate intenso al respecto, propiciado como no podía ser de otra manera por Iniciativa Ciudadana del Toledo Histórico. Un debate intenso con posicionamientos radicales y argumentos, en algunos casos, desnortados y rayando casi en la descalificación. Todos deseamos un Tajo limpio, sendas ecológicas de las que poder disfrutar y un casco histórico vivo.

    Iniciativa Ciudadana, o más bien su portavoz, “no comparte la visión exclusivamente utilitarista y mercantilista del barrio del casco histórico” y habla los “filantrópicos empresarios” del sector turístico para quienes los vecinos del Casco son una “rémora”. 

    Y sorprende esta “fobia” conociendo las vinculaciones del representante vecinal con el sector. Pero esta es otra cuestión, en la que mejor no profundizar para no entrar en el terreno personal.

    El caso es que si los bares, hoteles, restaurantes, comercios,... no dan vida a una ciudad. cuya principal fuente de riqueza sigue siendo el turismo, como parece que así defienden en sus argumentos, deberían explicar con mayor claridad cuáles son sus estrategias para revitalizar un casco histórico que pierde población. Un despoblamiento que, incluso, achacan al sector turístico o, más bien, a los bares. ¡Qué cosas hay que oir!

    Y me dirán que así lo hacen en las Juntas de Distrito, que a través de este instrumento ciudadano canalizan sus propuestas y que son contadas las ocasiones en las que obtienen respuesta. Quizá entre quejas, críticas y denuncias se dispersen las iniciativas y no llegan como debieran a los órganos competentes.

     No sé, quizá esté equivocada. Sin embargo, lo que sí tengo claro es que vecinos y sector turístico pueden convivir y converger. No creo que la solución pase por “echarle la llave” al casco histórico y “apagarle la luz”.