El boulevar de Boladíez, el "nuevo cacacan" del Polígono

Excrementos caninos. 

. El PP dice que la Campaña de Control de Excrementos Caninos "es un fracaso" 

Los concejales del PP en el Ayuntamiento de Toledo han denunciado hoy que de  nuevo el concejal de Participación Ciudadana, Antonio Guijarro, "engaña una vez más a los vecinos del Casco-Azucaica, al volver a darles largas" ante la petición de los populares y de los vecinos de Toledo de ser informados respecto a los resultados de la Campaña de carácter indefinido de Información y Vigilancia de Excrementos Caninos en nuestra ciudad y que el concejal de Gestión de los Servicios, Gabriel González, anunció poner en marcha en septiembre de 2012.

    Aseguran que las declaraciones de Guijarro en la Junta de Distrito  evidencian que el alcalde no dispone de informe alguno al respecto y "trata de distraer a los vecinos con vaguedades", informan en una nota de prensa.

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    El grupo municipal viene pidiendo de forma reiterada en juntas de distrito, en plenos del Ayuntamiento y en comisiones, el informe del resultado de la anunciada a “bombo y platillo” Campaña de Información y Vigilancia de Excrementos Caninos y que a día lo desconocen, habiendo trascurrido más de año y medio de la presentación de dicha campaña.

    De esta forma considera que "es evidente que ni García-Page ni sus concejales pisan la calle pues de hacerlo se darían cuenta que los excrementos caninos existen de forma alarmante por todos los barrios de la ciudad".

    Por otro lado, denuncian que "tampoco pisan mucho" el barrio de Santa María de Benquerencia, "donde la mediana-bulevar de la Avenida de Boladiez acumula multitud de excrementos caninos que nos hace pensar si es que es esta infraestructura municipal es ahora el nuevo “Cacacan” del barrio más poblado de la ciudad".

    Añaden que en el barrio de Santa Teresa los excrementos caninos se acumulan en las zonas ajardinadas de la calle Torrijos, Orgaz, Ocaña, etc, "calles que tal y como nos aseguran sus vecinos se encuentran abandonadas a perpetuidad por García-Page y donde las cacas no se recogen durante muchísimos tiempo". Y en el barrio de Valparaíso "es sorprendente ver montoneras de excrementos caninos en la Avenida del Carrasco, a tan solo doscientos metros de un centro escolar", añaden.

    Así las cosas, critican que el itinerario de cacas por la ciudad "es infinito", por lo que su juicio los resultados de la campaña "son nulos, quedándose en un mero anuncio de intenciones".